En varias ocasiones se escucha que hay operaciones de fusiones y adquisiciones que, aunque llegan a concluirse, no cumplen con las expectativas financieras previstas por las partes involucradas. Cuando se analiza el trasfondo y el proceso llevado a cabo en dichas operaciones semi-fallidas es posible conocer que hay razones, que pueden ser acciones u omisiones, que justifican el porqué, dentro de las cuales se encuentran los siguientes:
- Un Due Diligence incompleto y/o deficiente
Considerando que muchas empresas se pueden encontrar contra reloj para el cierre de una transacción de M&A, es común recaer en este supuesto. No obstante, a pesar de encontrarse limitadas en tiempo, las empresas deben saber cómo distribuir sus recursos humanos en las áreas de mayor análisis e importancia, toda vez que un dato no analizado o un documento no considerado, podría llegar a cambiar las conclusiones o las áreas a tratar en un futuro plan de cumplimiento normativo.
Por otro lado, es de suma importancia que el adquiriente o inversor se asegure de obtener toda la información y documentos necesarios para el conocimiento de qué es lo que pretende adquirir (previa celebración de un Contrato de Confidencialidad). Cuanto más vaga o incompleta sea la información obtenida, seguramente será menos probable que la transacción sea concluida satisfactoriamente.
Para dar una mayor seguridad respecto a la suficiencia de la información recabada, se recomienda realizar una lista de las áreas a revisar, entre lo que puede haber información societaria, fiscal, laboral, contractual, entre muchas otras, e invertir en recursos humanos y tecnológicos (entre ellos muchas novedosas herramientas de Legaltech) que permitan obtener información precisa, ordenada y completa.
- Falta de sinergia entre la administración y accionistas de una empresa
Otro error que se puede presentar en una operación de M&A es la falta de colaboración de la administración o dirección de una empresa para dialogar y analizar de manera objetiva la información del negocio a cerrar.
Resulta esencial que los accionistas cuenten con un equipo administrativo y directivo en el cual puedan depositar toda su confianza para el seguimiento y cierre de una transacción. Los más adecuados directivos generalmente son aquellos que se encuentran satisfechos y protegidos por su empresa, así como algunas veces incentivados económicamente para el correcto cierre del negocio.
- Falta de flexibilidad entre las partes involucradas
Finalmente, un error muy usual en las transacciones de M&A es la falta de flexibilidad de las partes. Al realizar un due diligence es casi 100% probable que la empresa a adquirir tenga áreas de oportunidad, no obstante, se debe considerar que no todas ellas tendrían que traducirse en suspender o terminar con la operación, sino que podrían ser corregidas a través de planes de cumplimiento normativo.
Asimismo, una negociación equilibrada y justa es esencial, las partes deben de ser conscientes que así como tendrán algunos puntos a su favor, también tendrán que ceder muchos otros. El punto clave es conocer los irrenunciables, los puntos que inicialmente llevaron a considerar la operación y aquellos que se han conocido que le otorgan mayor valor.