El Centro de Arbitraje de México (CAM) surge en 1997 con el objetivo de brindar a las empresas una alternativa a la resolución de controversias instaurándose como una administradora de arbitrajes, así en el marco de su 25 aniversario ha publicado la más reciente modificación a su Reglamento de arbitraje.
Hace aproximadamente 13 años que el CAM no realizaba una reestructura de este nivel a sus reglas de arbitraje, siendo que las reglas anteriores entraron en vigencia en 2009 y son las que se han utilizado en los procesos administrados por esta institución desde entonces.
Estas nuevas reglas de arbitraje entraron en vigor el 1 de diciembre de 2022 y algunas de sus modificaciones más relevantes son las siguientes:
- Se incluyen procedimientos simplificados para arbitrajes de cuantías menores a tres millones de pesos mexicanos, a los que también podrán acceder las partes si así lo desean aún con cuantías mayores. En este arbitraje se prevén tiempos más cortos, el nombramiento de un arbitro único, así como la posibilidad de las partes de no celebrar la audiencia arbitral.
- Se regula el uso de tecnologías de información y comunicación en el arbitraje y se prevé que las comunicaciones podrán ser siempre por medios electrónicos desde el inicio y durante todo el proceso arbitral, también se establece que las audiencias podrán llevarse a cabo de manera remota, presencial o en un esquema híbrido.
- Se adiciona la obligación expresa de las partes de revelar si cuentan con financiamiento de terceros mencionando la identidad del financiador.
- Se robustece la efectividad de las medidas cautelares estableciendo la facultad del Tribunal arbitral de ordenar que se mantengan las cosas en el estado en que se encuentran en tanto resuelve de manera definitiva respecto de las medidas cautelares solicitadas por las partes.
- Se otorga a los árbitros la facultad expresa de designar secretarios de Tribunal Arbitral conforme a las directrices emitidas por el CAM en conjunto con estas nuevas reglas de arbitraje.
- Se impone a los árbitros la obligación de verificar su independencia e imparcialidad de forma exhaustiva, así como su disponibilidad para fungir en su encargo al aceptar su designación.
- Se establecen disposiciones expresas sobre la incorporación de partes adicionales al arbtitraje
