La Organización Internacional del Trabajo (OIT) llevó a cabo una encuesta a nivel mundial con el objetivo de visualizar las experiencias de violencia y acoso laboral, marcando así el primer esfuerzo por ofrecer una perspectiva global sobre este fenómeno en los centros de trabajo. Los resultados revelaron que la prevalencia de la violencia y el acoso laboral es más frecuente de lo que comúnmente se cree.
Es crucial tener en cuenta la dificultad inherente para medir la violencia y el acoso en el entorno laboral. La encuesta destacó que solo aproximadamente la mitad de las víctimas a nivel global compartió sus experiencias con otras personas, y esto ocurrió con mayor frecuencia cuando habían sido víctimas de múltiples formas de violencia y acoso. Las razones detrás de este silencio incluyen la percepción de «pérdida de tiempo debido a la falta de seguimiento» y el «temor a dañar su reputación», siendo las mujeres más propensas a compartir sus experiencias en comparación con los hombres (60.7% frente al 50.1%).
A pesar de estas barreras, se identificó que más del 20% de las personas empleadas han experimentado al menos una forma de violencia o acoso laboral en algún momento de sus carreras profesionales.
Hablar sobre experiencias personales de violencia y acoso laboral es complejo. Poco más de la mitad de las víctimas ha compartido sus vivencias con alguien, y este diálogo suele abrirse después de haber sufrido más de una modalidad de violencia y acoso. Sin embargo, la visibilidad de este tema es esencial con el propósito de prevenir y erradicar cualquier forma de violencia o acoso laboral en los centros de trabajo.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México se registraron 109 mil renuncias atribuidas al acoso laboral en 2022, y se proyecta un aumento significativo para el cierre de 2023. Con esto podemos observar que el acoso laboral es una realidad constante en México.
Es importante señalar que esta cifra representa un 3.4% de todas las renuncias registradas en el país. No obstante, en la Ciudad de México y el Estado de Aguascalientes, la discriminación laboral o “mobbing” tiene una prevalencia del 7.8% y 6.3%, respectivamente, es decir, duplica la media nacional.
Ante esta situación, resulta imperativo implementar mecanismos internos en los centros de trabajo para brindar una atención adecuada a los casos de violencia y acoso laboral. La Ley Federal del Trabajo establece en su artículo 132, fracción XXXI, la obligación de implementar un protocolo para prevenir la discriminación por razones de género y atender casos de violencia, acoso u hostigamiento sexual. Este protocolo busca establecer directrices para la atención de denuncias por situaciones de violencia o acoso laboral, medidas de promoción para prevenir dichas situaciones y las sanciones aplicables en caso de confirmarse la existencia de acoso o violencia laboral.
Ante lo previamente expuesto, en caso de requerir apoyo para implementar las medidas y protocolos para prevenir la discriminación por razones de género y atender casos de violencia, acoso u hostigamiento sexual, el equipo del Área Laboral de Vega, Guerrero & Asociados se pone a su entera disposición.
